Preparar helados con fruta congelada ¡es de lo más fácil del mundo!, ya que solo necesitamos cortar la fruta, congelarla y triturar. No obstante, cuando queremos disfrutar de un helado con los sabores más «clásicos» (nata, vainilla o chocolate) sin que siempre tenga sabor a plátano, tenemos que recurrir a otro tipo de ingredientes, más allá de la fruta, que nos den una textura y un sabor similar a los helados de toda la vida.
Y ¡aquí entran los anacardos! En el mundo vegetal, este fruto seco es el que más se usa para preparar tartas, helados o quesos cuando no queremos usar lácteos, ya que nos dan una textura y un sabor que nos recuerda a ellos. A nivel personal, tengo que confesar que cuando consumo estos tipos de productos «crudiveganos», con gran cantidad de anacardos y frutos secos en general, me suelen caer muy pesados y me duele bastante la tripa luego. Por eso cuando me plantee esta receta tuve claro que la cantidad debería ser poca y que tenia que mezclarlos con otros ingredientes que le dieran cremosidad y sabor pero que, a su vez, lo aligeraran un poco.
Como la gran mayoría de frutos secos, los anacardos destacan por ser fuente de ácidos grasos esenciales (omega 6 y 9), proteína vegetal y fibra. Pero además, también contiene una parte de hidratos de carbono. Son una buena fuente de minerales como el magnesio, el cobre, fósforo, manganeso, zinc, selenio y hierro y también nos aportan vitamina E, vitaminas del grupo B y vitamina K.
Para endulzar el helado, he querido alejarme de todo azúcar y sirope añadido, y he ido a buscar aquellas fuentes más saludables: la fruta desecada, la fruta y las especias.
- Dátiles Medjool: para mi, uno de los grandes endulzantes en repostería saludable ya que su sabor es muy neutro cuando lo mezclamos con otros ingredientes y, además, se necesitan pocas cantidades para dar el toque dulce deseado.
- Plátano: en esta receta he decidido añadirlo porque, al tratarse de un helado de vainilla, encuentro que queda bastante bien con el sabor. Además, como es poca cantidad, el sabor a plátano no llama mucho la atención. En caso que prefiráis un relleno más tipo «nata», quizás no añadiría plátano y pondría unos pocos dátiles más.
- Vainilla: la que nos dará el sabor principal de los helados.
Por último, la cobertura, la he preparado con chocolate negro del 85% (o a veces incluso los he hecho con chocolate del 91%). En esta entrada podéis leer por qué es importante escoger un chocolate con alto porcentaje en cacao.
¡Ah! Y los toppings, evidentemente, ¡al gusto!.
Y ¡voilà! Este ha sido el resultado final de mis pruebas con los mini-magnums. Un helado con ingredientes saludables y de calidad, sin gluten, sin lácteos, sin azúcar, con una textura cremosa y suave y con un sabor DE-LI-CIOSO.
¡Espero que los disfrutéis tanto como yo! Y si compartís fotos en Instagram, ¡etiquetarme!, porque me encantará ver vuestras creaciones.
«The biggest adventure you can take is to live the life of your dreams» – Oprah Winfrey
Mini-helados de vainilla y chocolate
Ingredientes
(Para unos 16-18 mini-magnums)
- 175 g de anacardos
- 1 lata de leche de coco
- 1 plátano maduro (120g)
- 6 dátiles Medjool
- 150 g de bebida vegetal (para esta receta me gusta usar bebida vegetal de almendras sin azúcar y con aroma vainilla de Ecomil)
- 15 g de aceite de coco virgen extra
- 2 cucharaditas de vainilla líquida
Para la cobertura:
- 4 tabletas de chocolate negro del 85-90% (cantidad para 16 helados. Si tienes menos moldes y, por tanto, haces menos mini-magnums, vas a necesitar solamente 1 o 2).
- Para decorar podéis usar cualquier tipo de fruto seco o incluso fruta. Yo he usado:
- almendras troceadas y coco rallado
- nueces pecanas y almendras troceadas y pulpa de higos
Material:
- Moldes de «mini-magnums»
- Palitos de helado de madera
Elaboración
- La noche anterior:
- Remojar los anacardos en agua.
- Colocar la lata de leche de coco en la nevera.
- Pelar y cortar el plátano a rodajas y guardarlo en el congelador.
- Al día siguiente:
- Colar los anacardos del agua de remojo y colocarlos en el vaso de una batidora potente.
- Agregar los dátiles deshuesados, el plátano congelado, la bebida vegetal, el aceite de coco y la vainilla.
- Abrir la lata de leche de coco y, con una cuchara, retirar la pulpa de la parte superior y colocarla dentro de la batidora. El agua de la lata no lo usaremos.
- Triturar todos los ingredientes a máxima potencia hasta obtener una crema suave y homogénea. / Si usas thermomix: tritura 2 minutos 30 segundos/velocidad 10, aumentando progresivamente.
- Verter la masa en los moldes y colocar el palito de madera a través de la ranura indicada. Llevar al congelador durante mínimo 8h.
- Deshacer el chocolate al baño maría y, cuando esté deshecho, sacar los helados del congelador y desmoldar. Acto seguido, con la ayuda de una cuchara, bañarlos en chocolate para formar la cobertura y añadir los toppings. Como el helado está frío, el chocolate va a solidificar casi enseguida, por eso, ¡debéis ser rápidos añadiendo los toppings! ;). Dejar encima de una superficie antiadherente.
- Repetir el mismo procedimiento hasta cubrir todos los magnums. Luego, guardar en el congelador durante 2-3h.
- Importante: el relleno de estos helados se deshace con facilidad, así que NO debes sacarlos del congelador previamente antes de comerlos. Retíralos del congelador justo al momento y ¡a disfrutar!
¿No tienes molde para 16 mini-magnums y te ha sobrado masa? ¡Te doy 2 ideas para aprovecharla!
En mi caso solo dispongo de moldes para preparar 8 helados y, por tanto, cuando los preparo me sobra la mitad de la masa. Entonces, lo que hago es crear otros helados. Os propongo dos combinaciones que me gustan mucho:
1.Chunky monkey, con cacahuete, plátano y chocolate:
Ingredientes:
- 30 g de crema de cacahuete (también puede sustituirse por crema de almendras o avellanas)
- 1/2 plátano
- cacahuetes pelados (sustituibles por almendras o avellanas troceadas)
- 4-5 onzas de chocolate negro del 85-90%
Elaboración:
- A la masa de helado restante, añade la crema de cacahuete y tritura unos segundos para que quede bien incorporada.
- Trocea el plátano y las onzas de chocolate a trozos pequeños y agrégalas a la mezcla junto con los cacahuetes pelados. Mezcla para que queden bien integrados.
- Guarda en un tupper de cristal y congela.
2. Higos, nueces pecanas y chocolate:
Ingredientes:
- 10 higos maduros (mejor ecológicos ya que vamos a usar la piel).
- 30 g de nueces pecanas
- 4-5 onzas de chocolate negro del 85-90%
Elaboración:
- A la masa de helado restante, añade 6 higos y tritura unos segundos para que queden bien incorporada.
- Trocea los higos restantes, las nueces pecanas y el chocolate a trozos pequeños y agrégalos al helado. Mezcla para que queden bien integrados.
- Guarda en un tupper de cristal y congela.
¡Súper ricos!
¡Ah! Estos helados, al estar en un recipiente más grande y haber más cantidad junta, si que es mejor que los saquéis del congelador unos 15 minutos antes de consumir.
¡Espero que los disfrutéis y que os gusten mucho!
Un perfecto texto y bastante aconsejable. Enhorabuena